¿Quieres trabajar en una empresa o participar en un proyecto que te motiva? No esperes necesariamente a que se publique una oferta de trabajo y toma tú la iniciativa con una aplicación espontánea a la empresa que te interesa.
Pero si deseas atraer la atención del reclutador, es esencial seguir algunas reglas básicas. Aprende cómo hacer una aplicación espontánea en un puesto de trabajo.
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Consejos para una aplicación espontanea
¿Cuándo?
En cualquier momento que te guste una empresa o un proyecto.
Si crees que esa empresa sería la ideal para ti, no dejes pasar el momento, envíales tu documentación.
La documentación a enviar sería, un CV con foto y una carta de presentación.
¿Cómo?
Tu carta de presentación debe explicar por qué deseas unirte a la empresa, resaltar tus talentos, lo que te atrae en el negocio.
No te olvides de tu experiencia en el sector y tus habilidades que has adquirido durante tu trayectoria profesional
La claridad, la concisión y la precisión son tres habilidades clave.
¿A quién?
En una aplicación espontánea es esencial identificar a las personas adecuadas, ya que no siempre es RR.HH.
Es posible postularse directamente al director de un proyecto que te interese, y copiando a la persona a cargo de Recursos Humanos para no comprometerse.
Si en la empresa no existe departamento de RRHH, tendrás que identificar a la persona que pueda ocuparse de ese campo, el director o el gerente.
¿Por qué te consideras el adecuado?
¿Por qué puedo tener mi lugar en este negocio? ¿Qué puedo traer? ¿Cuáles son mis conocimientos?
Tienes que enfatizar tus habilidades para el puesto, contando tu experiencia en puestos similares o tus habilidades para llevar a cabo esa empresa.
Es esencial preparar las respuestas a estas preguntas antes de la entrevista de trabajo. En resumen, tienes que venderte.
