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¿Entrevistas laborales por Skype?

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En estos tiempos modernos, pareciera que los teléfonos fijos deberían ya pertenecer a un museo de la Historia de la Tecnología por lo obsoletos que están. En este post intentaremos aconsejarte sobre las entrevistas laborales por Skype.

No sorprende entonces que las empresas digitalicen sus procesos sacando provecho de nuevas tecnologías, entre ellos las entrevistas laborales por Skype.

Las entrevistas laborales por Skype realmente no tienen tanto de distinto que una entrevista de trabajo presencial, sin embargo, sí consideramos que hay un par de consejos a seguir para cuidar todos los detalles de la entrevista y dar la mejor impresión.

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Presta atención al fondo

Si llegases a tener una oficina en tu casa, entonces este consejo no es ya necesario.  

En caso de que no, entonces lo más ideal es que evites áreas domésticas de tu casa, como la cocina o tu cuarto.

Cuando ya tengas un lugar en mente, observa las paredes, decoraciones, y cualquier otra cosa que pueda dar una impresión casual y no profesional, como los pósters de tu banda favorita.

Lo ideal seria una pared blanca o con algún cuadro que no desentone mucho.

Vístete para el éxito

Más allá de que lo mínimo que un reclutador espera es que te vistas bien para la situación, realmente una buena vestimenta suele darte motivación y confianza en ti mismo.

Demuestra que por Skype o en persona te preocupas por tu aspecto, aunque tampoco vayas tan lejos, pues un traje conservador será más que suficiente.

Lo ideal, aseado y presentable, como irías a trabajar un día cualquiera si esta empresa te contratara.

Haz pruebas antes de la llamada

Sabemos que Skype y casi todas las plataformas de llamadas en línea son suceptibles a mala señal e interrupciones, por eso, horas o días antes, haz una videollamada de prueba.

Si quieres, pídele a un amigo o un familiar que te diga si tu voz se escucha bien y qué piensa del fondo de tu casa.

Chequea que la comunicación sea fluida y que la llamada no sufra interrupciones.

Que él o ella te haga las preguntas clásicas de un entrevistador y que te diga qué piensa de tus respuestas.

Debes estar tranquilo y con fluidez, los nervios pueden llevarte a que se te vea tenso y rígido.

Responde con naturalidad y si algo no entiendes o no sabes no dudes en preguntar.

Puedes hacer preguntas para relajar la tensión, sobre la empresa, tu puesto, etc…

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